Page 1 (Insta360•Pocket3)
Page 1 (Insta360•Pocket3)
Estampas de un viaje maravilloso a Italia
Celebración anticipada del cumpleaños número 80 de mi papá
El viaje a Italia continuaba imbuido de un aire de aventura, donde cada paso se tejía en el momento, guiados por el ritmo de nuestros corazones. El 30 de noviembre estaba destinado a ser el día del viaje a Roma. Con la primera luz del amanecer, partimos de Pompeya rumbo a Nápoles en tren (ver página Pompeya). En esta época del año, no era necesario comprar los boletos con anticipación, así que los adquirimos directamente en la estación.
La estación, pequeña y acogedora, tenía una sencilla rotonda a la entrada donde los taxis esperaban pacientemente a los turistas. A ambos lados de la entrada, restaurantes y tiendas de recuerdos exhibían su mercancía: mapas, blusas, camisetas, imanes y postales que capturaban la esencia de la región.
"Buongiorno!", saludé al entrar en cada local, y el eco de esa misma palabra devuelta por los locales me envolvió en una cálida bienvenida. El idioma, con su musicalidad y acento, me conquistaba cada vez más.
"Scusa, quanto costa il biglietto per Napoli? Per favore", pregunté con una sonrisa. La amabilidad de la gente era palpable, y en poco tiempo tenía nuestros boletos en mano. Mientras tanto, observé a mi padre, quien revisaba con curiosidad algunos recuerdos de Pompeya en la tienda contigua. En ese instante, sentí una presión familiar en el pecho, justo arriba y a la izquierda del esternón. La reconocí de inmediato: era la emoción de ver a mi padre feliz, ahí, tan cerca de mí. Por dos semanas enteras, mi padre era solo mío, y esa sensación me embargaba de una felicidad profunda y un tanto abrumadora.
Llegamos a la Stazione di Napoli Centrale, una estación con historia que se remonta a 1866 y que se erige como la principal estación de trenes de Nápoles, además de ser una de las más importantes del sur de Italia. Ubicada frente a la Piazza Garibaldi, en el corazón vibrante de la ciudad, esta estación es un punto de encuentro bullicioso y lleno de vida, donde convergen viajeros locales y visitantes como nosotros, y todos se mueven el ritmo inconfundible de este sector de Nápoles.
Desde allí, decidimos emprender una corta caminata hacia Piazza Nazionale. A diferencia de otras plazas napolitanas, como la majestuosa Piazza del Plebiscito o la histórica Piazza Dante, esta plaza no destaca por su belleza artística ni por su fama turística. Sin embargo, tiene un encanto propio. Está rodeada de edificios residenciales y comerciales que le dan un carácter popular y cotidiano. Caminar por allí fue como sumergirse en la vida real de la ciudad.
La elección de visitar Piazza Nazionale no fue casual: su cercanía a la estación y el deseo de estirar las piernas después del viaje en tren nos llevaron hasta allí. Fue una decisión espontánea, como tantas otras en este viaje, que nos permitió descubrir rincones menos conocidos pero igualmente valiosos de Nápoles. Cada paso por esas calles era una oportunidad para sentir el pulso de la ciudad, para dejarnos llevar por su esencia y, sobre todo, para disfrutar de esos momentos en los que mi padre y yo éramos cómplices de la misma aventura.
Esta página tiene las fotos tomadas con Insta360 y con Pocket3. Visita la página ROMA 2 para ver las fotos tomadas con la Canon R5.
Ξ The journey through Italy continued to be imbued with an air of adventure, where each step was woven in the moment, guided by the rhythm of our hearts. November 30th was destined to be the day of our trip to Rome. At the first light of dawn, we departed from Pompeii heading to Naples by train (see Pompeii page). During this time of year, there was no need to buy tickets in advance, so we purchased them directly at the station.
The station, small and cozy, had a simple roundabout at the entrance where taxis patiently waited for tourists. On both sides of the entrance, restaurants and souvenir shops displayed their merchandise: maps, blouses, t-shirts, magnets, and postcards that captured the essence of the region.
"Buongiorno!" I greeted as I entered each shop, and the echo of that same word returned by the locals enveloped me in a warm welcome. The language, with its musicality and accent, captivated me more and more.
"Scusa, quanto costa il biglietto per Napoli? Per favore," I asked with a smile. The kindness of the people was palpable, and in no time, I had our tickets in hand. Meanwhile, I watched my father, who was curiously examining some Pompeii souvenirs in the shop next door. At that moment, I felt a familiar pressure in my chest, just above and to the left of my sternum. I recognized it immediately: it was the emotion of seeing my father happy, there, so close to me. For two whole weeks, my father was mine alone, and that sensation filled me with a deep and somewhat overwhelming happiness.
We arrived at Stazione di Napoli Centrale, a station with a history dating back to 1866, standing as the main train station of Naples and one of the most important in southern Italy. Located in front of Piazza Garibaldi, in the vibrant heart of the city, this station is a bustling and lively meeting point where travelers, locals, and the unmistakable rhythm of Naples converge.
From there, we decided to take a short walk to Piazza Nazionale. Unlike other Neapolitan squares, such as the majestic Piazza del Plebiscito or the historic Piazza Dante, this square does not stand out for its artistic beauty or tourist fame. However, it has its own charm, modest and authentic, surrounded by residential and commercial buildings that give it a popular and everyday character. Walking there was like immersing ourselves in the real life of the city, away from the more traveled tourist circuits.
The choice to visit Piazza Nazionale was not random: its proximity to the station and the desire to stretch our legs after the train journey led us there. It was a spontaneous decision, like so many others on this trip, that allowed us to discover lesser-known but equally valuable corners of Naples. Every step through those streets was an opportunity to feel the pulse of the city, to let ourselves be carried away by its essence, and, above all, to enjoy those moments when my father and I were accomplices in the same adventure. Ξ
Roma Capitale
El siguiente paso era uno de esos imprescindibles en la lista de "Cosas por hacer mientras estemos en Italia": Viajar en el tren de alta velocidad. Y, sin duda, valió cada segundo del esfuerzo. El viaje fue increíblemente suave, casi imperceptible, a penas se sentía el movimiento dentro del tren, y la velocidad tan alta que no se veían detalles en el suelo afuera y alado del tren, era como ver una foto muy difusa.
Ξ The next step was one of those must-dos on the list of "Things to do while we're in Italy": riding the high-speed train. And without a doubt, it was worth every second of the effort. The journey was incredibly smooth, almost imperceptible; you could barely feel the movement inside the train. The speed was so high that the details of the train tracks outside the window blurred, as if the ground beyond had turned into a hazy, out-of-focus photograph rushing past us. Ξ
En Roma estuvimos 5 dias. Nos quedamos en el Hotel Contilia (Hotelcontilia.com), cerca de la estación Roma Termini. Este es un excelente lugar si quieren visitar Roma (mi comentario en Google Maps: https://maps.app.goo.gl/gqktLr9Pgfp6vnWg8).
En Roma visitamos tantos lugares y todos nos dejaron excelentes recuerdos: El famoso Coliseo Romano, el Foro Romano, la Basilica Papale di Santa Maria Maggiore, Piazza de la Republica donde está el impresionante Anantara Palazzo Naiadi, Circo Massimo, el barrio Rione Trevi, conocido por su rica historia, sus calles estrechas y sus impresionantes monumentos, incluida la famosa Fontana di Trevi. La Piazza Navona y su Fontana del Moro. Visitamos el Museo del Vaticano, que nos tomó todo un día para conocer muchas de las colecciones, las impresionantes pinturas de murales y techos, y en especial la Capella Sisitina, famosa por las pinturas de Michelangelo. También visitamos la Basílica di San Pietro, en el Vaticano, otro paseo de un día entero. Recorrimos la Via Appia Antica en bus (una de las rutas romanas más famosas y antiguas de la historia, un símbolo del ingeniero y poderío del Imperio Romano) hasta la Catacombe di San Callisto. En la Piazza Venezia visitamos la hermosa Basilica di Santa Maria in Aracoeli, a la que se llega subiendo la Scalinata dell'Ara Coeli, y en la misma plaza también visitamos el Central Museum of the Risorgimento con su Altare della Patria, un sitio hermoso, con esculturas impresionantes, externas, un arte delicioso que no cuesta nada apreciar porque muchas de las obras están en los exteriores, es parte del edificio.
El tiempo obviamente no fue suficiente, y tendremos que regresar. Roma es un sitio para visitarlo muchas veces.
Espero disfruten las fotos, son bastantes. Visiten la página Roma 2, donde están las fotos que tomé con mi cámara Canon R5.
Recuerda que también puedes visitar la otra página de mi viaje a Italia:
→ Pompeya ←
Visit page to see my pictures from Pompeii.
Pipico, mi querido osito de peluche. Él ha estado conmigo desde que tengo 5 años, y ha viajado a tantos lugares. De pequeña en mi ciudad natal, Pipico miraba por las ventanas del bus para recordar el camino a casa, en caso de que nos perdiéramos.
≡ Pipico, my loyal teddy bear, has been with me since I was 5 years old, and he has traveled to so many places. ≡
Pipico, mon cher ours en peluche. Il est avec moi depuis que j’ai 5 ans, et il a voyagé dans tant d’endroits. Quand j’étais petite, dans ma ville natale, Pipico regardait par les fenêtres du bus pour se souvenir du chemin de la maison, au cas où nous nous serions perdus.
→ Roma 2 ←
Visita la página con las fotos tomadas con Canon R5.
Visit Roma 2, the page with the pictures taken with Canon R5.
Cities ••• Photography ••• Home
Dee Chiluiza 2025® Boston, Massachusetts